sábado, 27 de febrero de 2016

Licantropias de la arcilla

Era una eficaz figura de arcilla que se amoldaba
a la destreza de los dedos que la tocaban.
Podía con pasmosa tranquilidad
revestir la fisonomía de la serpiente
 y como ella morderse sabiamente la cola
o, por el contrario,abultarse en las formas 
prehistóricas de los dinosaurios y
exhibir una mandíbula metafísica.
Alguien la vio convertirse
en frágil libélula y posarse levemente
sobre el  filo imperceptible de un sueño.
Otros  la intuyeron en las patas desafiantes
de una gacela que arrasaba los aires ,
los fuegos y los prejuicios.
No faltó quien jurara haberla visto
en el cuerpo estilizado de una cariátide.
Todos lo intentaron pero
ninguno la poseyó.


                                             

No hay comentarios:

Publicar un comentario