No le creas cuando dice que te ama
y que eres la modelo de sus sueños
ya Kafka se lo dijo a Milena
y Rodin a Camille Claudel
en las mismas aguas del infierno.
El discurso de los hombres
no refleja el lenguaje de los dioses
porque
donde yace el duende no habita el dragón
donde moran los herejes no existe la ley divina
donde eyaculan los monos no se aparean los tigres.
Por eso véngate y dile
que eres la amante de Fidias
y que tu carne sólo es
frío mármol esculpido.